Según Paul Graham, el fundador de Y Combinator, una startup es una empresa diseñada para crecer rápido.
Según él, se necesitan dos cosas para que una empresa pueda ser una startup:
- Hacer algo que mucha gente quiera.
- Que la empresa logre atender y llegar a toda esa gente.
Por ejemplo, pensemos en el caso de un almacén vs Cornershop. Cornershop sí es una startup (o lo era antes de ser comprada por Uber) y el almacén no. ¿Por qué el almacén no es una startup?
El almacén cumple bien el punto 1: hacer algo que mucha gente quiera. Todo el mundo quiere comprar abarrotes, es necesario para sobrevivir.
Pero tiene el problema de que no puede atender a toda esa gente. Dado que está restringido geográficamente, solo puede atender a la gente de su barrio.
En cambio Cornershop cumple con hacer algo que mucha gente quiere, además de poder atender a muchísima gente. Cornershop está en Chile, México, Estados Unidos… y en varias ciudades de cada país.
Ojo: no es necesario que desde el día cero puedas llegar a todos lados. De hecho, más adelante vamos a ver que la mejor forma de partir, es sin pensar tanto en cómo escalar en el futuro.
¿Qué se necesita para construir una startup ?
Son principalmente 4 cosas: una idea, un equipo, un gran producto, y buena ejecución.
1. Idea
Soluciona un problema
Lo primero es que tu idea tiene que solucionar un problema.
Si quieres empezar a construir algo, preocúpate de que efectivamente estés resolviéndole un problema a alguien.
Lo ideal sería que tú mismo tengas ese problema, así estás seguro de que existe.
La otra opción es que entiendas al usuario objetivo increíblemente bien. Requiere harto esfuerzo, pero es posible.
Curiosamente, hay muchas startups que parten con algo porque les gusta mucho una tecnología.
Les gusta tanto la inteligencia artificial, que construyen un producto que usa IA pero no le resuelve un problema a nadie.
Eso está mal. Hay que partir desde el problema.
Fácil de explicar
Una buena idea es fácil de explicar.
Cuando te pregunten lo que haces, la respuesta o el pitch tiene que ser entendible rápidamente.
Una idea que se explica de manera compleja, puede ser signo de una mente que está nublada o de un problema que en verdad no existe.
Si te cuesta explicar la idea y/o no entusiasma a nadie, entonces quizás no tienes un problema real.
Construir un MVP
¿Cómo puedes saber si una idea es buena? Construyendo un MVP. Un MVP es un mínimo producto viable.
El objetivo del MVP es validar las hipótesis de tu negocio.
Tu negocio va a estar lleno de hipótesis, que si se cumplen, te va a ir bien. Con el MVP tienes que validarlas.
Para decidir qué construir para el MVP, pregúntate:
¿Qué es lo mínimo que tengo que construir para validar que las personas quieran lo que haré?
Al principio, un MVP puede ser algo que parezca automático, pero en realidad por detrás es todo manual. Es el equipo haciendo todo y haciéndolo parecer automático. Incluso puedes no programar nada, y usar una combinación de herramientas que ya existan.
Lo mejor para ver si una idea o una hipótesis es correcta, es construir algo rápido y lanzarlo.
O quizás intentar venderlo antes de construirlo.
Mercado creciente
Una buena idea por lo general está en un mercado que está creciendo.
Tienen que tener muy claro qué tan grande es hoy, qué tan rápido está creciendo y por qué va a ser grande en 10 años.
Es genial cuando hay un cambio tecnológico importante, porque las empresas grandes y antiguas suelen ser malas para aprovechar esos cambios.
Es una oportunidad para las startups.
Suenan mal, pero son buenas
La mayoría de las buenas ideas suenan mal pero en verdad son buenas.
La realidad es que las ideas evidentemente buenas ya están casi todas tomadas.
No hay por qué ser muy receloso con tu idea: si es buena, probablemente no suene tan bien como para robarla. O va a ser difícil, y nadie va a creer que es posible.
Por ejemplo, al equipo de Fintual, una startup para invertir tu dinero sin trámites, todos les decían que tenían una mala idea porque regularse y sacar la licencia de AGF necesaria era imposible. Y lo hicieron.
Si a alguien le dan ganas de robar tu idea, la verdad es que la idea por sí sola no sirve de mucho.
Hay miles de personas con buenas ideas, pero pocas que pueden llevarlas a cabo y hacer una empresa exitosa de ellas.
Trabaja en proyectos interesantes
Si no tienes “buenas” ideas, te traigo una: trabaja en proyectos que encuentres interesantes. Haz cosas con gente que encuentres admirable o que te llame la atención trabajar con ellas.
En algún momento las buenas ideas van a nacer.
Ejemplo: Airbnb
Airbnb tenía una idea en la que nadie creía. Es raro decirlo ahora. Es demasiado obvio que SÍ es una buena idea... pero porque lo estamos viendo una vez que tuvieron éxito.
Cuando partieron, a los dos fundadores de Airbnb les estaba yendo más o menos mal. Nadie creía en la idea. Los inversionistas creían que era tonto que alguien arrendara su casa a un extraño. La casa es algo demasiado personal.
De hecho, a uno de los primeros inversionistas de Airbnb no le gustaba nada la idea. Solo le gustaron los fundadores, y por eso decidió invertir.
Ahora todos quieren hacer el Airbnb de lo que sea. El Airbnb de los veterinarios, de los gasfiter, etc. Pasó a ser una idea obvia.
Pero en ese minuto no lo era.
Así que puede que hayan muchas ideas que no son obvias hoy, y que lo van a ser en el futuro. Hay que estar atentos.
2. Equipo
Fundadores
Lo más importante de una startup son los fundadores. En especial al principio porque están prácticamente solos.
Determinación
La característica más importante de un fundador es la determinación. Determinación es "perseverar hacia un objetivo pese a las dificultades".
La inteligencia es importante, pero ni por si acaso es suficiente. Hay muchísima gente muy inteligente que le va mal haciendo startups.
Algo importante es que la determinación no solo es importante en los founders, también en los primeros empleados.
Confianza en su capacidad de terminar tareas
Los mejores fundadores son con los que uno está relajado trabajando con ellos porque uno siente que "él o ella lo van a lograr y lo van a hacer bien, no importa la tarea que sea".
Si conocen a alguien al que le tienen ese nivel de confianza, tienen un buen candidato a cofundador.
Rigidez y flexibilidad
Un buen fundador está muy convencido de la visión a largo plazo. Pero es flexible en cómo llegar a esa visión de largo plazo.
Por ejemplo: si alguien está construyendo un producto basado en Bitcoin, entonces no puede tener dudas de que Bitcoin será importante en el futuro.
Pero puede ser flexible en el producto a construir sobre Bitcoin.
Fácil de hablar
Dentro de los fundadores tiene que haber al menos uno con el que sea fácil hablar.
Alguien que pueda llevar la comunicación con clientes, usuarios, equipo, etc. No es necesario que sean todos, pero la comunicación, al crear una empresa, es clave.
También es importante que alguno de los fundadores pueda volverse bueno vendiendo. No es necesario que lo sea ahora, pero sí es necesario que pueda serlo en el futuro.
Por favor, no se imaginen al vendedor de las películas, es mucho menos exagerado que eso.
Fundador técnico
Si es una startup digital, tienes que tener un cofundador que sepa programar.
Si es de biotecnología, tienes que tener un biotecnólogo o un científico.
Es mala idea tercerizar el desarrollo a una empresa de software, por ejemplo.
Es importante tener la capacidad técnica dentro del equipo fundador. Si no, no van a entender bien el producto que tienen que construir.
Puedes leer más acá:
Elige con cuidado
Si les toca elegir un cofundador, no lo hagan a la ligera. Es una decisión super importante, es como emparejarte por 6 a 10 años. Es un camino largo.
Muchos cofundadores que les va mal se conocen de manera random, y eso es un riesgo grande. Ojalá la persona que elijas sea alguien que conozcas bien, desde hace varios años. Ya sabes cómo trabaja, y sientes que trabajan bien juntos.
Y que compartan la misma ética de trabajo.
Los puntos 3 (Producto) y 4 (Ejecución), están en la parte 2 del artículo.