Últimamente me ha llamado mucho la atención las herramientas que entrega Internet para influenciar de formas novedosas en los mercados financieros.
Ninguno de los fondos que apostaban en contra de las acciones de GameStop se imaginaba que un grupo de desconocidos se organizarían por Reddit para comprar acciones en masa y hacer subir el precio (si no sabes de qué estoy hablando, te recomiendo este post de Fintual).
Pero con lo que más me he obsesionado, sobre todo en el último mes, es preguntarme cuánto afecta realmente en el mundo crypto los comentarios públicos de una persona en particular. Elon Musk.
Siempre que aparecía un tweet de Elon sobre Bitcoin pensaba "algún día voy a buscar cada uno de sus tweets sobre BTC y analizar si hay una reacción del mercado evidenciada en una variación sustancial en el precio". La noticia de que Tesla suspendería la compra en bitcoin me convencieron de que tenía que llevar a cabo mi investigación. No podía dejar pasar la oportunidad de ver la influencia (o no) de los delirantes cambios de opinión con respecto a las cryptos del fundador de PayPal. Era ahora o nunca.
Así que empecé. A través de la búsqueda avanzada de Twitter busqué todas las publicaciones de @ElonMusk que incluyeran las palabras bitcoin, btc, crypto, hodl, moon y por supuesto dogecoin. Me quedé con los tweets más destacados a contar del año 2017, anotando el texto, el contexto, la fecha, hora y la cantidad de retweets, citaciones y likes. Logré construir toda la historia de amor entre Elon y Bitcoin a través de 33 tweets que recopilé en un excel.
Luego, tome las fechas y horas de esos 33 tweets y los comparé con el precio del bitcoin, para ver si habían generado una variación significativa en el mercado. Del total, se observa una presumible conexión entre 9 tweets y variaciones significativas y rápidas en el precio de bitcoin.
Estos son los resultados.
Primero, un poco de historia.
Todo partió cuando en el año 2017 se corrió el rumor de que el creador de Bitcoin, Satoshi Nakamoto, era en realidad el mismísimo Elon Musk. Un pasante de SpaceX que trabajaba con él aseguraba que su jefe cumplía todas las características necesarias para ser el misterioso creador y que lo más probable es que fuera él. La respuesta de nuestro (anti)héroe no se hizo esperar:
Qué decepción. El inventor más famoso del último tiempo no era Satoshi, es más, se mostraba completamente desinteresado por el tema. ¿Cuántos BTC le mandó su amigo? Nos lo diría en un tweet unos meses después.
Lo relevante es que este tweet genera uno de los primeros cambios notables en el precio, bajando desde $10.262 (a las 6:14) a los $9.756 (a las 22:14 del mismo día). Una variación de -4,93%. Nada muy relevante, tal vez fue una mera coincidencia.
Primeros acercamientos.
Saltamos a 2019. 20 de febrero. Coindesk saca una publicación dando a conocer la opinión de Elon sobre Bitcoin emitida en una entrevista con Cathie Wood, CEO y CIO de Ark Invest. ¿Su dictamen? Las crypto son una mejor manera de transferir valor que un pedazo de papel, pero no es buena idea que Tesla involucre recursos en crypto, por ser una compañía que promueve la adopción de energías sustentables. Vaya vaya señor Elon, desde el 2019 que sabía - y le preocupaba - el gasto energético de Bitcoin.
Nuevo salto de un año. 10 de enero de 2020. Sin motivo aparente, nuestro personaje twittea a las 03:53 "Bitcoin no es mi palabra segura." ¿Qué quería decir con este misterioso mensaje? Ni idea, pero este tweet ya tiene 118.000 likes y nuevamente el precio sufre un cambio destacable, solo que esta vez... sube. Aumenta de $7.830 a las 03:44 a $8.211 a las 22:29. Una variación similar, 4,87%. Interesante.
El 15 de mayo de ese mismo año tiene un extraño intercambio con JK Rowling, la autora de Harry Potter, en donde critica lo complicado de las explicaciones de Bitcoin, pero que era bastante "solido" si se lo comparaba con las masivas emisiones de moneda por los bancos centrales. Luego remata con su inmutable saldo:
Todavía lo vemos escéptico. No ha comprado más. No se convence. Otros comentarios muestran que ya está tanteando el agua, pero le falta ese salto que haga meterse por completo.
El salto a la cryptomanía.
No tuvo que pasar mucho tiempo. Solo dos meses para que le agarrara la locura de empezar a publicar memes. Pero no de Bitcoin, no señor, de Dogecoin.
Es su tweet sobre crypto con más reacciones a esa fecha y el segundo con más likes que pude encontrar sobre el tema, pero no motiva una reacción acorde en el mercado.
Desde aquí la cosa comienza a ponerse extraña. El 20 de diciembre de 2020 hay una serie de tweets de Elon en donde dispara para todos lados. A las 05:21 dice que "Bitcoin es su palabra segura", para arrepentirse a los 19 minutos.
Luego saca una de sus más grandes peladas de cable que le he visto, un meme calificado como NSFW.
Quién sabe si fue la inexplicable revelación de un hombre loco e impulsivo a través del meme lo que hizo que Michael Saylor, fundador de MicroStrategy, se atreviera a aconsejarle a Musk que si quería hacerle un favor de $100.000 millones de dólares a los accionistas de Tesla, debía convertir su balance de USD a BTC. Su respuesta: "¿Son posibles transacciones de ese tamaño?".
El público twittero explota de emoción. La posibilidad que Tesla compre BTC está cada vez más cerca. Pero extrañamente el precio no cambia.
La respuesta de esta invariabilidad ante los mensajes de Musk puede deberse a que paralelamente, nuestro protagonista ha denostado el Bitcoin, al considerarlo casi tan bullshit como el dinero fiat.
Pero hay algo que el público no sabe. Los planes de adquisición de BTC por parte de Tesla ya están en marcha y en enero de 2021 cambian sus políticas de inversión e invierten $1.500 millones en bitcoin. Por el momento, en teoría, nadie sabe esta información, dado que es divulgada en el reporte anual a la SEC el 8 de febrero del mismo año.
Pero como ya deben haber venido comprando desde principios de enero, el precio subía y subía, rompiendo todos los all time highs. 20k, 25k, 30k, una racha alcista que no veía su fin. Una marea de compradores y ojos expectantes que se posan nuevamente en la rareza de las cryptomonedas, blockchain, billetaras virtuales, FOMO y ansias de una ganancia rápida. Un caldo de cultivo que Elon supo aprovechar. Con 5 palabras mágicas y con un solitario #Bitcoin en su perfil envalentonó a todos trayendo a la memoria ese meme de una tormenta de arena con la cara de un perro avanzando imparable sobre la ciudad. Era su forma de decir "Se los dije".
TO THE MOON! 🚀. En un poco más de cinco horas el Bitcoin sube 18,89%, de $32.276 (a las 5:19) a $38.372 (a las 10:39). Es la publicación de Elon que más ha influido en el precio del BTC.
El 8 de febrero ya todo el mundo sabe oficialmente que Tesla metió todo el cuerpo en BTC y miran expectantes las movidas de Elon, esperando ese mensaje semi oculto que los impulse a seguir comprando y les de la tranquilidad que todo inversionista necesita. "De qué me voy a preocupar si el hombre más inteligente del planeta confía en Bitcoin".
Esos mensajes llegan el 19 de febrero, reconociendo a Bitcoin como una "forma menos tonta de liquidez que el efectivo" y afirmando que "solo un tonto no mira a otro lado cuando la moneda fiat tiene un interés real negativo", impulsa con sus palabras el precio un 9,94% en menos de un día, de $51.313 (a las 12:04) a $56.412 (a las 22:04).
La incertidumbre y diversión.
Pero su relación con Bitcoin ya se va aclarando, es de amor y odio. Para él es casi tan "mierda" como la moneda fiat. Le gusta, pero no le convence a cabalidad.
Por mientras, el precio sigue subiendo y subiendo, próximo a llegar a su máximo histórico. No creo que Elon Musk sea el causante de toda esta vorágine, pero sabe aprovechar los momentos para meter ruido, y con la publicación con más retweets, citaciones y likes, logra aumentar el precio en otro 5,48% en 6 horas, llegando a $57.018.
El Bitcoin está imparable. Día a día las pantallas muestran números verdes y grandes volúmenes de transacciones. Las conversaciones de crypto vuelven a recordar ese momento de oro del 2017. Las palabras hodl, moon, lambos y FOMO vuelven con fuerza. A Elon le gusta, lo pasa bien, disfruta su fama y estoy seguro que sabe perfectamente la tremenda influencia que provocan sus 280 caracteres. ¿Qué importa? Para él todo es un juego.
Pero el Bitcoin ya tocó su techo en esta racha y le toca corregir. Va de bajada. Pequeños rebotes dan esperanzas de que siga subiendo, pero solo son falsas esperanzas. La pregunta ya no es si va a bajar, si no, hasta dónde.
El rechazo.
De nada ayuda el hecho que Tesla vende el 10% de sus bitcoins para "demostrar la liquidez de los bitcoins frente al efectivo". La confianza va disminuyendo y los inversionistas que han entrado se asustan. Un Tweet el 7 de mayo logra repuntar un 1,5% en 40 minutos.
Cryptocurrency is promising, but please invest with caution!
La frase parece más un salvavidas de plomo que una convicción. Manotazos de ahogado que anuncian el inminente debacle. El precio sigue bajando y ahora solo necesita un empujoncito de alguien que lo devuelva a sus temidas profundidades. Empujoncito que llega de quien supuestamente es entendido en el tema y en quienes todos han depositado su confianza. En menos de 2 meses, cual niño caprichoso, la posición de Tesla cambia, los pagos con BTC están suspendidos hasta nuevo aviso.
Si bien ya venía bajando sostenidamente, el precio se desploma 14,05% en solo dos horas. De $54.658 (a las 18:04) a $46.980 (a las 20:04).
Las críticas no se hacen esperar. Desde la entrevista el 2019 que Elon sabe del gasto energético de BTC. Imposible que alguien como él, CEO de SpaceX, no tenga idea de como funciona una crypto que viene siguiendo al menos desde 2017. Además, ha reconocido en la misma red social que lo ha enaltecido que Bitcoin incentiva la energía limpia.
Una vuelta de carnero de lo más extraña, seguida de varios tweets durante mayo en donde critica la ineficacia energética del protocolo, debiendo hasta aclarar a través de un mensaje que "Tesla no ha vendido ningún Bitcoin", para evitar las especulaciones en base a sus mensajes (algún llamado de atención le debe haber llegado de sus abogados).
No todo está perdido.
Pero a Musk todavía le queda material para dar de que hablar y tweets que influyan notoriamente en el mercado.
Parece que no le gustan las críticas que ha recibido y vuelve a aclarar su postura el 22 de mayo, esta vez mandando un mensaje tipo bien y el mal, que por lo demás aumenta el precio en un 4,42% en 45 minutos, de $36.945 a $38.579.
Dos días más tarde termina su romance con Bitcoin (por el momento) con un tweet que deja abierta la puerta para que Tesla vuelva a aceptar BTC como medios de pago. Nuevamente el precio aumenta, esta vez un 4,87% en 25 minutos, de $37.893 a $39.740.
El misterioso plan de Musk.
Así termina nuestro repaso histórico de Elon y Bitcoin. Una historia de desconocimiento, aceptación, rechazo y semi reconciliación. Una relación tan extraña que permitió que una persona relativamente nueva en el mundo Bitcoin y sin previo mayor interés terminara influenciando directamente el precio de la crypto más importante del mundo con solo 280 caracteres.
A mi juicio Elon Musk reconoce que Bitcoin puede ser capaz de incentivar las energías renovables y simplemente está jugando sus cartas con una visión a largo plazo. Pero esa es solo mi opinión, cada uno es libre de sacar sus propias conclusiones.
* Toda la información de precios es en base a Coinmarketcap. Los valores están en USD. Todas las horas corresponden a Santiago de Chile (UCT -4).